El actor Michael Madsen, rostro icónico del cine de Hollywood, conocido por sus papeles en películas como Kill Bill, Donnie Brasco y Reservoir Dogs, falleció este jueves en su residencia de Malibú, al sur de Los Ángeles, California. La información fue confirmada por el medio The Hollywood Reporter, mientras que TMZ fue el primero en dar a conocer la noticia.
Madsen, de 67 años, alcanzó fama internacional por sus colaboraciones con el director Quentin Tarantino, especialmente en Reservoir Dogs (1992), donde interpretó al memorable y violento Mr. Blonde, y posteriormente en la saga de Kill Bill, donde encarnó a Budd, uno de los antagonistas principales. Su estilo duro, voz grave y presencia imponente lo convirtieron en uno de los actores más reconocibles del cine de acción y crimen durante las décadas de 1990 y 2000.
Además de sus colaboraciones con Tarantino, Madsen trabajó con actores como Al Pacino, Johnny Depp y Uma Thurman, consolidando una carrera prolífica con más de 200 películas en su haber. También tuvo incursiones en la televisión, la poesía y la producción cinematográfica.
Hasta el momento, no se ha revelado la causa oficial de su muerte. Sin embargo, familiares cercanos y representantes han solicitado respeto a la privacidad de la familia en este momento de duelo.
Madsen había enfrentado momentos difíciles en los últimos años, incluyendo el fallecimiento de su hijo Hudson en 2022, un hecho que lo afectó profundamente. Aun así, el actor continuaba vinculado a varios proyectos cinematográficos y apariciones en convenciones de cine.
La industria del entretenimiento lamenta la pérdida de un actor de presencia única y trayectoria intensa, cuya carrera dejó huella en el cine independiente y comercial por igual.